viernes, 21 de julio de 2017

EL BOXEO FEMENINO PERUANO MUESTRA SU MEJOR ROSTRO DE CARA A LOS BOLIVARIANOS Y PANAMERICANOS 2019

imagen por prensa del IPD

Las fieras del ring. Batalladoras y perseverantes, así son las seis jóvenes que representan la sangre nueva del boxeo nacional, que con carácter sobre el cuadrilátero defienden ante el mundo el pugilismo femenino.

Las pugilistas que integran la preselección peruana dirigidas por el profesor Jesús Colunga Sánchez son: Sandra Lavado, Alondra Benítez, Fiorella Goucoechea, Fiorella Conroy, Esperanza Miñope y Rosmery Iturrizaga.

Para los Juegos Panamericanos Toronto 2015, fueron dos nuestras representantes en la cita continental con Stefani Barrientos y Lucía Valdivia. Hoy, a diferencia de esa edición, el Perú tiene un grupo mayor de boxeadoras producto del trabajo de renovación que la Federación Nacional Peruana de Boxeo está impulsando junto al Instituto Peruano del Deporte, enfocado en tener una selección digna y bien preparada de cara a los Juegos Bolivarianos 2017 y los Panamericanos Lima 2019.

Dos de las chicas descubiertas en los Guantes de Bronce fueron Fiorella Conroy y Sandra Lavado, esta última destaca por su elocuencia y amor por el deporte.

Sandra Lavado (23 años)

Sandra contagia con su ilusión y su ímpetu por lograr sus sueños. Asegura que la fuerza no debe ser empleada como violencia. Cree que el deporte de contacto no es exclusivo para hombres. Ella asegura que le regalará una medalla importante al Perú. También es taekwondista y practicó vóley, pero ahora está enamorada del boxeo.

“Una vez tuve que defenderme de un delincuente que quería robarme. Lo empuje por instinto y él se sorprendió hasta el punto de decirme que ‘no pensaba que iba a reaccionar así’, incluso me acompañó hasta la puerta de mi casa (risas)”.

En un principio sus padres se opusieron a que reciba golpes, pero ella persigue sus sueños y está confiada en alcanzarlos.

“Hasta ahora continúan diciéndome que ‘por qué sigo haciendo esa tontería’. Incluso me intentaron botar de mi casa, pero a mí no me importó y yo seguiré, porque estoy segura que algún día se van a sentir orgullosos de mí”

Fiorella Goycoechea (19 años)

Fiorella nació en San Antonio de Huarochiri. Asegura que anhela ser olímpica y ganar una medalla de oro para el país. Esta joven deportista tiene una sonrisa encantadora y en sus palabras muestra su nobleza. Para ella el boxeo no le quita la feminidad. Confiesa que se inició en la disciplina porque quería bajar de peso, pero ahora es su pasión.

“Totalmente falso. Sobre el ring, en el gimnasio, somos boxeadoras, fuera de ahí somos mujeres comunes, tenemos nuestras amistades e incluso enamorado, como yo”

Esperanza Miñope (24 años)

Esta pugilista es chiclayana, y apenas tiene dos meses entrenando en Lima. Dice sentirse afortunada de estar rodeada de grandes profesores como Alberto Rossel. Tiene la esperanza de regalarle al país la primera medalla olímpica en la especialidad. Ama tanto el boxeo que dejó a su familia por continuar entrenando.

“El boxeo para mí es el aire que respiro, es mi todo. En Chiclayo dejé a mi madre, la extraño´, pero ella sabe que el boxeo es mi motivación. Yo llegué a Lima y gané un campeonato nacional. En primera instancia no fui preseleccionada, yo pedí la oportunidad de ser vista y ahí fue que convencí a los profesores”, aseguró la joven boxeadora.

Rosmery Iturrizaga (23 años)

‘La gringa’, le dicen. Ella es arequipeña. Cuenta que dejó su familia y los estudios por seguir sus sueños. En el 2014 fue preseleccionada por primera vez por la federación, pero desistió y se regresó a su ciudad natal. Hoy dice haber regresado con fuerza y convencida de superarse. Antes de salir de casa le prometió a su madre que representaría al Perú en un evento grande.

“La gente no sabe que este deporte es un gran esfuerzo. Dejar a tu familia, dejar todo en cada entrenamiento. Poner disciplina para poder salir adelante. El boxeo me ha ayudado a cambia en todo aspecto, en mi vida, en la forma como trato a mi familia, a las personas. Me ha ayudado a ver la vida diferente”, asevera la joven deportista nacional.

No cabe duda que Kina Malpartida, Linda Lecca y Rocío Gaspar son inspiración de lucha y constancia para esta nueva generación del boxeo femenino que busca la gloria con los colores del Perú.

Rocío Gaspar, entrena en las instalaciones de la Federación Peruana de Boxeo bajo el techo del histórico gimnasio Mauro Mina, ‘La Bombonera’. Ella, recuerda sus duros inicios en el amateurismo.

“Cuando me inicié no llegábamos ni a tres chicas. Hoy veo más y sobre todo con mucho más apoyo. Hoy la federación y el IPD están apoyando en alimentación, alojamiento para los jóvenes de provincia, y en equipamiento que se necesita. Les veo talento y preparación con entrenadores preparados y de alta experiencia”, resalta la esbelta boxeadora peruana.

Tras la desafiliación que el pugilismo peruano recibió como sanción por parte del AIBA dejándola sin opciones de competir internacionalmente, incluso sin la posibilidad de participar en el preolímpico, la nueva realidad del boxeo peruano tiene un futuro esperanzador para poder redirigir la historia de esta disciplina.

En el próximo mes de octubre saldrá la lista definitiva para los Bolivarianos. De las 6, 2 serán seleccionadas para los próximos Juegos Bolivarianos Santa Marta 2017.

PRENSA IPD

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