sábado, 20 de marzo de 2010

ADIÒS EDWIN CENTENO - ATLETISMO DEL PERÙ ESTÀ DE LUTO

imágen por fuerzaedwin.blogspot.com

FALLECIÒ UNA DE LAS FIGURAS TRASCENDENTES DE LA CAMINATA PERUANA

El marchista peruano Edwin Centeno falleció víctima de una penosa enfermedad que lo tenía postrado desde el año pasado, como consecuencia de un derrame cerebral. Lamentablemente hoy dejo de existir en su natal Puno.

Edwin Centeno fue una de las figuras peruanas de la caminata que más trascendencia tuvo en el ámbito internacional y deja para el archivo sus récords nacionales absolutos vigentes en 20 Km. Ruta con 1h 24.53 realizada en Lima el 19 de marzo de 2005, en 35 km. Marcha en Ruta con 2h 48' 12"9 en Puerto Saavedra, Chile del 15 de setiembre de 2002 y en 50 Km. Marcha en Ruta con 4h 13'10" realizado en Cochabamba, Bolivia del 21 de agosto de 2005. Todo estos récords los realizó de la mano de su entrenador Alfredo Quispe.

El caminante puneño logrò el campeonato sudamericano en los 35 kilòmetros mayores en 2h 48'12"9, a la edad de 21 años, en Puerto Saavedra, Chile, en el 2002. Su actuación fue una sorpresa porque su meta estaba concentrada en clasificar el 20 campeonato mundial IAAF de Torino, Italia en los 20 kilòmetros.

En el sudamericano de Cuenca 2001 en los 35 kilòmetros fue medalla de plata con 3h1'49" y en los Juegos Iberoamericanos de Guatemala en los 20 kilòmetros fue dècimo con 1h34", siendo el mejor tercero de América, después de Ecuador y Brasil. En el 2007 hizo la marca "B" para los Juegos Olímpicos de Beijing.

Centeno hasta antes de enfermarse estuvo entrenando en el Centro de Alto Rendimiento de Arequipa, para afrontar futuros compromisos internacionales, pero no pudo recuperarse para volver a caminar.

imágen por Betty Soto

Además de atleta, era estudiante de Ingenieria Industrial en la Universidad Católica de Santa María de Arequipa. Fallece a los 28 años. (27/06/1981)

Sus restos tendrán cristiana sepultura en Chucuito, Ciudad de las Cajas Reales, en Puno. A toda su familia, nuestras sentidas condolencias.

Edwin, sólo nos queda decirte: ¡Amigo que descanses en paz!

Judith Chuquipul Torrejón
C.P.D.P. 432 LM

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